El 15 de octubre se conmemora el Día Mundial del Lavado de Manos, una práctica que tiene especial relevancia en el actual contexto de Covid-19 así como la tuvo en 2009 como medida de prevención de la gripe A. Pero que previene muchas más enfermedades, entre ellas, la diarrea infantil.

Palmas de las manos, dorso de las manos, entre los dedos, la yema de los dedos y los pulgares. Esos son los cinco pasos que se recomiendan para un correcto lavado de manos. Es posible que ponerlos en práctica lleve el mismo tiempo que memorizarlos y, si se tiene en cuenta todas las enfermedades que previenen, se verá que bien vale el empeño.

Sabina Urda es Lic. en Enfermería y está al frente del Servicio de Control de Infecciones, Epidemiología y Seguridad del paciente del Hospital Iturraspe. Este jueves será la 14ª ocasión en la que realizará la única actividad abierta a la comunidad que organiza ese servicio. Será en ocasión del Día Mundial del Lavado de Manos, y para ello se hará docencia entre niños, niñas y personas adultas que transiten por la entrada sur de ese efector de salud. El objetivo es explicar cómo se deben higienizar las manos y en qué momentos claves de la rutina diaria.

«Antes de comer y después de ir al baño» anticipa en una charla con El Litoral y con Cable & Diario. Más adelante quedará en claro por qué es tan importante.

El origen

«En el año 2007 la Organización Mundial de la Salud y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia veían con mucha preocupación que las dos principales causas de muerte en niños menores de 5 años alrededor del mundo eran las infecciones respiratorias y las diarreas», explica Urda y concluye en que ambas causas son absolutamente prevenibles. ¿Cómo? Con un correcto lavado de manos. Fue entonces cuando se estableció en el calendario sanitario la fecha que se conmemora este jueves en todo el mundo.

«El propósito de la campaña es despertar conciencia sobre la importancia del hábito en niños y niñas; cuanto más temprano lo incorporen, mejor», opina Urda sobre esta práctica simple y sencilla que requiere de agua y jabón, dos elementos que encabezan las medidas de prevención de Covid-19, la enfermedad que puso en jaque a todo el mundo.

Las razones

Si bien hay muchas situaciones en las que resulta importante lavarse las manos (luego de tocar una mascota, antes de cocinar) «queremos enfocar el mensaje en dos situaciones críticas que van a prevenir estas dos enfermedades como son las infecciones respiratorias y las diarreas. Esos momentos son antes de comer y después de ir al baño.

¿Por qué? «Porque un gramo de materia fecal puede tener diez millones de virus, un millón de bacterias, 1000 quistes de parásito o 100 huevos de gusanos. Todo eso cabe en un espacio similar a la cabeza de un alfiler», explicó la especialista.

El rotavirus, que cada año produce diarrea en tantos niños y desvela a adultos, también se evita con el lavado de manos. «Un gramo de materia fecal puede contener 100 millones de partículas virales, mientras que la dosis infectiva se ubica en un rango de 10 a 100 partículas virales. Esto es lo que marca la contagiosidad y todo esto se puede prevenir», grafica.

Urda reconoció que la adherencia de la población a esta práctica no llega al 50 por ciento, pero confía en que el mensaje se propague entre los chicos que son «poderosos agentes de cambio», y se contagie -esta vez si es bienvenido el término- al resto de la comunidad.

Si se le pregunta cuál es su objetivo, responderá que es «una ciudad en la que no haya consultas por diarrea infantil ni por infecciones respiratorias». Pero también que la difusión de esta técnica y su implicancia sanitaria sea «una política de Estado que esté presente en los medios masivos y sea difundida a través de las redes sociales». Porque «tenemos la certeza de que esta práctica sencilla salva vidas».